EL RETO


EL RETO

El reto es hoy, Marina se levantó muy temprano, se le veía nerviosa,  no entendía porqué había aceptado la invitación, pero ahora sí que tenía que cumplir. Se puso unas alpargatas viejas que le prestaron, que más bien parecían chalupas de lo grandes que estaban, sus pies retorcidos se amoldaron muy bien al calzado y salió muy orgullosa recogiéndose la falda para no ensuciarla con el lodazal del camino, por fin llegó al asfalto, no pasó mucho tiempo cuando vió venir un tumulto de gente murmurando y riendo, todos llevaban en su mano derecha un buen bote de agua y las mujeres se habían recogido las trenzas, - bien- pensó Marina y armándose de valor se integró a la multitud, corría firme y con paso seguro, conforme pasaban los minutos su respiración se iba haciendo más rápida pero no le importaba, en sus pensamientos solo había cuatro palabras "esa corona será mía" , y así se repetía una y otra vez hasta que el cansancio hizo más lento su andar y las pesadas trenzas llenas de sudor le bajaban la cabeza, ya no veía el camino, perdió dirección y rumbo, el mundo se hacía más redondo y no alcanzaba a ver la meta. "Esa corona será mía", y ya no respiraba por la nariz, su boca se abría en señal de rebeldía y el cuerpo pesaba más, a lo lejos, como se miran los oasis en el desierto,  alcanzó a ver una gran manta amarilla que fosforeaba con el viento, su corazón se regocijó y apretó la marcha, una sonrisa muy grande se dibujó en su rostro cansado, casi arrastrando los pies llegó a la meta, un quinto lugar no fué malo, se recogió el enmarañado cabello y solo dijo será para la próxima vez.